Alimentados fermentados y probióticos

Cada vez se escucha más el uso indistinto de los términos: Probióticos y alimentos fermentados. ¿Eres de los que no tiene muy claras las diferencias entre estos? ¡Para eso hemos escrito este blog! Aclararemos las dudas para que vayas corrigiendo a todo aquel que usa estas dos palabras como si fueran lo mismo. 

Es importante saber, que no todos los alimentos fermentados son probióticos ni todos los probióticos se encuentran disponibles exclusivamente en los alimentos fermentados. La fermentación es un proceso que transforma la materia orgánica causando degradación en la sustancia. Para que esta fase ocurra, tiene que haber ausencia de oxígeno. 

¿Cuándo un alimento fermentado se puede considerar un probiótico? Para que esto ocurra, debe de contener cepas de bacterias, cuya acción beneficiosa estuviera probada, y que además haya las cantidades adecuadas de estas. También tenemos que contar con que el alimento no haya sido sometido a un proceso térmico, para conservar las bacterias. Pongo un ejemplo: El pan, éste pasa por una etapa de fermentación, por las levaduras, y después se mete al horno. Por lo tanto, el pan es un alimento fermentado, pero ya no contiene microorganismos vivos después de ser horneado. 

Sin embargo, el chucrut casero (col blanca cortada en tiras finas y fermentada con vinagre y especias) al no ser sometido a un proceso de calor, si contendrá microorganismos vivos. Ahora bien, que algunos alimentos fermentados contengan microorganismos vivos no implica que ya sean probióticos. ¿Te estoy haciendo un poco de lío? 

Como he comentado antes, ha de haber una acción beneficiosa probada por parte de las bacterias y, las cantidades adecuadas. Por tanto, los alimentos fermentados de manera tradicional, en los que surgen una gran variedad de microorganismos vivos, no podrían clasificarse como probióticos, aunque eso no quita que nos aporten una gran variedad de beneficios. De hecho, los alimentos fermentados que contienen microorganismos vivos (como el chucrut y el kéfir) nos ayudan a aumentar la diversidad de nuestra microbiota intestinal. Por otra parte, se han encontrado microorganismos específicos en ciertos alimentos fermentados que han demostrado ejercer un efecto beneficioso sobre la salud, por lo que ahí sí que serían probióticos. 

Lo sé, demasiado tecnicismo en este artículo, pero si has llegado hasta aquí, entonces has aprendido ya, que no todos los alimentos fermentados contienen probióticos y el por qué de ello. Así que ya no pueden ir tongándote por ahí. 

Aunque está claro, que la manera más fácil y deliciosa de ingerir probióticos, es con nuestros chocolates newyou


No lo dudes, y ¡Beat your rules con newyou!